EL SEGUNDO, California, EE.UU. (AP). Ni siquiera Kobe Bryant entiende por qué los Lakers de Los Angeles pretenden traspasar a Lamar Odom a uno de sus grandes rivales.
"Es duro perder a Lamar", dijo Bryant. "Pau (Gasol) todavía está aquí y estamos agradecidos por eso. Es difícil, cuando has pasado tantas batallas con otros jugadores, verlos partir a otro lugar. Es difícil".
Ninguno de los equipos involucrados anunció una transferencia, pero el entrenador de Dallas Rick Carlisle y su astro alemán Dirk Nowitzki prácticamente confirmaron el acuerdo, al reconocer su entusiasmo por la llegada de Odom al plantel campeón de la NBA sin tener que dar a un jugador a cambio.
De hecho, los Lakers cambiarían a Odom por nada más que una excepción de traspaso, una regla que significa que pueden adquirir a un jugador que gane tanto como él o menos durante el próximo año sin las complicaciones que esto suele acarrear respecto del tope salarial y otras reglas.
Odom no fue al complejo de los Lakers y sus compañeros no se mostraron contentos por su posible partida contra el equipo que los barrió de la segunda ronda de postemporada el año pasado.
"En especial a ellos", dijo Bryant. "Se suponía que teníamos que recuperarnos y tomarnos revancha".
"¿A quién nos dieron?", agregó y se refirió al dueño de los Mavs: "No creo que Mark Cuban esté quejándose por esta transferencia".
La gerencia de los Lakers intentó adquirir al base de Nueva Orleáns Chris Paul y ahora parece enfocarse en el pivote de Orlando Dwight Howard, que pidió al Magic ser traspasado.
Odom, el mejor sexto hombre de la temporada pasada, no fue a entrenar los tres primeros días de pretemporada, luego que los Lakers intentaron transferirlo a él y al español Gasol en un acuerdo tripartito para recibir a Paul. La NBA, dueña de los Hornets, vetó ese canje.
En medio de este caos, el nuevo entrenador Mike Brown intenta planear una temporada que comienza en dos semanas, cuando Los Angeles recibe a los Bulls de Chicago en Navidad.
Gasol, cuatro veces estelar, se presentó a entrenar pese a que también podría irse pronto.
"Entiendo que esto es un negocio y se ha convertido en más negocio que deporte hoy en día", dijo el español. "No hay sido muy fácil estar calmado y tranquilo y no pensar sobre las posibilidades. Pero aún estoy aquí y lo agradezco".
FUENTE: Agencia AP