SHANGHAI (AP). Con las heridas aún no sanadas tras su humillante caída contra su archirrival Argentina, Brasil buscará el viernes ante Bélgica ganar la medalla de bronce, su único consuelo al esfumarse su sueño de un oro en el fútbol olímpico.
Brasil había ganado medallas de plata en Los Angeles 1984 y Seúl 1988, cuando el técnico Dunga era jugador del equipo, mientras que en Atlanta 1996, se llevó el bronce y en Beijing se perfilaba como favorito para lograr el título.
Los brasileños arrancaron el torneo a paso lento justo contra Bélgica con la que sufrieron para vencerlos 1-0, pero un despertar de Ronaldinho les permitió seguir con goleadas contra Nueva Zelanda (5-0), China (3-0) y en los cuartos de final frente a Camerún (2-0), en tiempo extra.
Cuando todo parecía un panorama despejado, aparecieron los argentinos en las semifinales y los bajaron de las nubes.
Ronaldinho, la gran figura de la verdeamarela, dijo que ahora el equipo tiene que encontrar la forma de levantar el ánimo para jugar contra los belgas.
"Vamos a tratar de encontrar motivación. Ese es mi función como capitán", comentó Ronaldinho sobre el choque contra los belgas.
"Dinho", sin embargo, reconoció que el "objetivo era ganar la medalla de oro".
Contra Bélgica, los brasileños no podrán contar con los volantes Lucas, del Liverpool inglés, y Thiago Neves, del Fluminense brasileño, expulsados por juego brusco contra los argentinos.
El choque se disputará a las 19.00 en Shanghai. Argentina enfrentará a Nigeria el sábado por el oro.
FUENTE: Agencia AP