MUNDIAL Mundial 2014 - 

Grecia sigue apostando a su garra

ATENAS (AP). Para alguien que lo ve desde afuera, poco o nada ha cambiado en Grecia durante la última década.

La selección griega no pierde ese instinto de anotar en las postrimerías de los partidos, jugadores que pasan inadvertidos y una defensa que juega con un espíritu combativo, como en la vieja Esparta.

Esos fueron los ingredientes que le ayudaron a derribar a oponentes de fuste para conquistar el campeonato de la Eurocopa 2004.

Los griegos no se pierden acudir a las grandes del fútbol, un bálsamo para un país golpeado por una galopante crisis financiera que afectó desde salud pública hasta los logros en el resto de los deportes.

Atraparon su boleto al Mundial de Brasil tras vencer a Rumania en un repechaje. No pudieron conseguir el pase directo debido a la diferencia de goles, luego de ocho triunfos en diez partidos, en los que apenas endosaron cuatro tantos.

En Brasil, los griegos enfrentarán a Japón, Colombia y Costa de Marfil. Sus tres rivales practican un juego fluido y rápido, el tipo de fútbol que más complica a los dirigidos por su técnico Fernando Santos.

Todos cruzan los dedos por la recuperación plena de dos defensores que vienen de lesiones. Uno es Dimitris Siovas del Olympiacos. El otro es Kyriakos Papdopoulos, quien se perdió partidos a lo largo de 13 meses con su club, el Schalke alemán, por una lesión en la rodilla derecha.

Santos, un técnico portugués de 59 años y ex defensor, relevó en 2010 al alemán Otto Rehhagel, quien permaneció en el puesto por nueve años y les consagró campeones de la Euro.

"Atinaron con Santos. Mantuvo a Grecia a un buen nivel, Rehhagel le dio la estructura, pero Fernando lo complementó. Se entendió con los jugadores, creo que eso fue importante. Parece griego, por la forma en que se ve, como fuma, es más emotivo. Le gusta a la gente", comentó Paris Ayiomamitis, un veterano periodista especializado de fútbol que edita el semanario en inglés Athens Views.

El otro factor principal fue cuando la crisis golpeó, los futbolistas siguieron a continuación de los médicos, obreros e ingenieros, pues hicieron las maletas para tratar de subsistir en el exterior.

Más de la mitad de los integrantes de la selección juega fuera del país, incluyendo al capitán Giorgios Kragounis del Fulham, el defensa Sokratis Papastathopoulos del Borussia Dortmund, el futbolista griego más caro, y el atacante del Celtic, Georgios Samaras.

Clubes tradicionales del fútbol griego, como Panathinaikos y AEK Atenas, han dejado de ser la base de la selección. Por ejemplo, en 2004, diez de los 23 convocados a la Euro militan en esos equipos. Las deudas asfixiaron de tal manera a AEK, que en 2013 descendió de la primera división por primera vez en su historia.

"Muchos equipos locales del futbol griego están colapsando. Muchos más jugadores de la selección juegan fuera. Eso significa que están más cómodos y tienen una mejor actitud", comentó Ayiomamitis. "Están expuestos a una mayor exigencia".

Mientras los jugadores hallaron acomodo en otra parte, el deporte en casa sufrió recortes presupuestales y escasos patrocinios de particulares, en medio de una crisis financiera que borró un cuarto de la economía del país y que dejó a más de un millón de griegos en el desempleo.

La cosecha de medallas en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 fue de seis oros, seis platas y cuatro bronces para los griegos. En los Juegos de Londres 2012, todo se limitó a solamente dos medallas de bronce. Las instalaciones olímpicas cerca de Atenas lucen vacías y muchos entrenadores tienen que obrar milagros para pagar las cuentas de la luz en los sitios de práctica.

FUENTE: DEREK GATOPOULOS (Associated Press)